martes, septiembre 02, 2008

Sempiterno

¿Es acaso objetable no ver?.
¿Es acaso imposible de evitar?.
No sabría yo decir las cosas que he visto y he vivido.
No sabría contarlas, no podría.
Quizás alguna vez pueda yo enclaustrarlas, escribirlas, condenarlas.
De igual manera, podría dejarlas escapar, siempre los ojos olvidan.
Si sus manos me han guiado, me han dotado, ¿es acaso su culpa mi desvariar?
¿es quizás intencional mi sufrir?
No quisiera yo encontrarme en el pasadizo de culpar.
No es mi intención salpicar con mis lágrimas a los ajenos.
Sin embargo, todos, lento, se van.
Y yo los veo, los siento.
Y así, suavemente, me recuesto en mi silla, los dejo pasar.
Lentamente se van. Y yo más me alejo.