lunes, diciembre 18, 2006

Cabezones - Estadio Pepsi Music (16.12.06)


Temperatura: 40º.
En el Estadio Pepsi Music (Obras, bah) la temperatura debería ser, como mínimo, 45º.
Alrededor de las siete de la tarde, la fila de gente pasaba la puerta del CENARD. Varias cámaras de distintos medios filmaban a la gente. Muy lindo todo.
A las ocho de la noche (más o menos) abren la puerta y la gente del campo empieza a pasar. La revisión de mochilas / ropas no fue muy estricta como se pensaba y se pasaron cosas que la lógica indicaba que te sacarían automáticamente.
Adentro, el típico puestito de Lee-Chi con las remeras de rigor más el agregado de un puesto de Icarus que vendía a precios muy accesibles algunos de los discos de su catálogo.

El calor que hacía adentro del estadio era atroz. Botellas de agua a dos pesos fueron casi la panacea del sediento.
Camino a los baños podías quedarte respirando un poco el fresco que anunciaba la lluvia posterior y ver un partido de fútbol que, a juzgar por los gritos de los que lo vieron, pintaba muy copado.

Tipo nueve y media diez, empieza el show. La primer frase de "Vertiente" ("...y camino en laberintos tan desiertos / déjame llegar...") sonaba con un telón blanco que no se bajaba.
En cuánto lo sacaron explotó todo. César de nuevo en un escenario era demasiado, y más siendo ese escenario.

Tocaron todo y más.
"Vertiente", "Frágil", "Sueles Dejarme Solo", "Irte", "El Vientre", "Mírame", "Globo", una muy linda versión de "Mi Pequeña Infinidad", "Lejos Es No Estar" con Ricardo Mollo, "Silencia" con
Fernando Ruiz Díaz, "Pasajero En Extinción" con Catupecu Machu + Zeta, "Inmóvil". En las lista figuraba "Alud" pero no la tocaron.
Para el final del show, Esteban tocó con una Les Paul de Fernando Ruiz Díaz que con las luces y la distancia se veía todo lo hermosa que puede ser una de esas guitarras.

Una falsa despedida, una vuelta "que nadie sabía que podía pasar", dos temas más, Fernando y la gente de PopArt entregando el dvd de oro por "Bienvenidos" (Fer: "esto es más grosso que un disco de oro, es un dvd de oro" ?????) y después, cada uno a su hogar y a mojarse bajo la lluvia, que refrescó la vida de todo el mundo.

Más que mucha gente post 31.03, los de siempre se notaban mucho. Lágrimas por pocos lados pero caras de querer soltar un par se veían bastantes.

César se la bancaba parado hasta que realmente no podía sostenerse y se sentaba en un bonito sillón. Se fue apoyado en un asistente y en un bastón, algo que provocaba confusiones sentimentales que iban desde la hermosura de verlo caminando y sobre un escenario hasta la angustia de verlo así.

"Quieren quilombo? No les parece suficiente quilombo que estemos tocando acá?". Esa frase de César se me pegó en la cabeza.

Que hermoso es el quilombo si que Cabezones toque en Obras es uno...




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